Como ya todo el mundo conoce, la cantante y actriz colonense Elizabeth Grimaldo estuvo por años fuera de su natal Panamá porque quería cumplir y nutrir su sueño de ser actriz.
Lee también: Lucero niega la existencia de un catálogo de prostitución de Televisa
Ella partió a la ciudad de Los Ángeles para prepararse como actriz y así tocar puertas en algunos proyectos en grandes candenas. ¡Y lo logró!
Mira también: Rubén Blades alienta presencia joven en protestas contra Parlamento en Panamá
Años después anunció en su cuenta personal de Instagram que iniciaría grabaciones con la cadena Telemundo. Sí, la chica de Colón se había ganado un papel en secundario en una telenovela. ¡Algo es algo mana! "Es una bendición, porque ese fue mi primer 'casting' para telenovela, expresó en ese entonces.
Liz Grimaldo destacó en una entrevista que espera poder abrir una academia en Panamá para transmitir todos sus conocimientos adquiridos en Estados Unidos. ¡Ajá!
Bueno, después de tanto tiempo ella volvió con todo. Y lo más importante es que está en Panamá desde hace un tiempito para festejar la patria que la vio nacer: "Panamá".
"Hace mucho no estaba en la tierrita en esta época del año para celebrarla. Feliz 116 años de vida Republicana mi adorada Panamá. Feliz día mi Bandera tricolor, te llevo conmigo SIEMPRE, a donde quiera que vaya, orgullosa", fueron sus palabras junto a una foto que subió a sus redes ataviada con su pollera de gala.
Cabe mencionar que Grimaldo tiene un personaje en Instagram llamado "Mirna", que habla como "racataca". El mismo se ha robado el corazón de los colonenses, quienes le escriben para que siga interpretándolo.
Colonense con el papel protagónico de 'Algo azul'
Desde el 15 de septiembre hasta el 19 de octubre se realizó en la ciudad de Panamá el rodaje de Algo azul, primer largometraje de la directora panameña Mariel García Spooner, proyecto ganador del premio Fondo Cine, otorgado por la Dirección Nacional de Cine de Panamá. ¡Y Elizabeth Grimaldo participó en este proyecto!
La cinta trata la historia de Ana (Elizabeth), una coordinadora de eventos de un glamoroso hotel que está ahorrando para pagar su boda. Su vestido de novia termina en ruinas justo el día en que finalmente ha recaudado el dinero para pagarlo. Decepcionada, regresa al hotel donde, en una de las habitaciones, encuentra el vestido de novia de sus sueños. Tentada, se lo prueba y es descubierta por Lucía de la Fuente, la dueña del vestido. Sin pensarlo, huye con el traje puesto y se da cuenta que tiene el amuleto de toda boda: algo técnicamente prestado (el vestido) y algo azul (sus zapatillas). Ahora deberá encontrar algo viejo y nuevo para organizar la boda más rápida del año. Sin saberlo Ana se convierte en el fenómeno mediático del día y arranca una divertida carrera por toda la ciudad para lograr su sueño de casarse mientras reflexiona sobre el amor verdadero.